A la hora de presentar un trabajo académico adquiere gran importancia la presentación final: tanto la escrita, como la oral; si ambas son cuidadas potenciarán nuestro trabajo. La presentación escrita cobra relevancia de cara al lector y es clave para exponer nuestra investigación de la forma más apropiada.
La redacción es uno de los procesos que más debemos cuidar. En ocasiones, redactamos en momentos diferentes y el estilo de redacción puede variar. Trataremos de mantener el uso de un lenguaje homogéneo e impersonal.
Cuando nos enfrentamos a un TFG o TFM el principal punto de partida es la elección de la temática que abordaremos; en muchas ocasiones genera indecisión, pues podemos tener varias opciones y no saber por cual decantarnos, o no tener clara la idea. En la mayoría de casos, las premisas iniciales se basan en la elección de una temática original, que no haya sido tratada previamente. Sin embargo, nuestro objetivo debe centrarse en escoger aquella que nos interese, motive y haga sentirnos cómodos en su proceso de documentación, redacción y exposición. En definitiva, encontrar la motivación en un trabajo académico, puede ser de gran ayuda en el proceso de desarrollo. Partiendo de esta motivación mejoraremos la presentación escrita del trabajo implementando estas pautas:
- En la redacción, además de una correcta utilización del lenguaje, es recomendable el uso de un estilo académico claro y directo, que facilite la comunicación y la comprensión de lo que queremos expresar.
- De igual manera, tanto la ortografía, como la inclusión de signos de puntuación son imprescindibles para una correcta legibilidad y desarrollo de un trabajo académico. Es por ello que emplear correctores automáticos de texto para cerciorarnos de su correcta implementación puede ser de gran ayuda.
- Hemos de evitar la repetición de determinadas muletillas o expresiones, utilizando sinónimos siempre que sea oportuno. Para la consulta de sinónimos, disponemos de muchos recursos online, uno de ellos es Wordreference. Además, para las dudas ortográficas, puedes utilizar el diccionario de la RAE.
- Además, para destacar en la presentación de nuestro proyecto, una maquetación atractiva será uno de los recursos esenciales para guiar al lector y potenciar su atención. Tendrá que cumplir los estándares citados por el coordinador o la plantilla propuesta por el tutor. Un buen trabajo de maquetación facilita la comprensión y legibilidad.
- Al dar por comenzado el proceso de maquetación debemos tener en cuenta el diseño de la página: es decir, tanto el interlineado, la justificación que incluimos en el texto y los márgenes que utilizamos, como la paginación.
- De igual importancia será la elección tipográfica y su tamaño; debemos seleccionar un tamaño estándar de 11 puntos para el texto, y otro mayor para los títulos, organizando así con la fuente o fuentes seleccionadas el proyecto.
- Recuerda que emplear diferentes elementos gráficos como tablas, imágenes, mapas, etc., puede ayudar a organizar los datos de un modo más atractivo y visual captando la atención del lector.
Estos son algunos de los consejos que puedes seguir; pero si tienes dudas acerca de cómo enfrentarte al planteamiento escrito, y entrega de un proyecto académico o simplemente deseas ampliar la información, recuerda que la biblioteca de la UNED cuenta con una guía donde son explicados al detalle cada uno de los puntos a tener en cuenta.
La guía de la Universidad de Salamanca tiene el inconveniente —o la ventaja, según se mire— de estar destinada a alumnos que cursan una titulación en Ciencias de la Salud o Ciencias Sociales. No obstante, tiene capítulos que bien pueden servir a estudiantes matriculados en otras titulaciones.
Desde hace algún tiempo vengo recopilando libros relacionados con la metodología de la investigación y la comunicación académica —o científica, si se prefiere—. La lista completa se puede ver en este enlace.
Algunos de los libros están disponibles en abierto y se pueden consultar directamente en línea. Otros solo aparecen referenciados para poder buscarlos en bibliotecas o —si se desea— adquirirlos en una librería. La lista no está enfocada a ninguna titulación en particular, aunque suelo recopilar guías y libros relacionados más con Humanidades y Ciencias Sociales que con estudios científico-técnicos.