Un nuevo artículo publicado en Royal Society Open Science, titulado Opening science to society: How to progress societal engagement into (open) science policies, presenta recomendaciones específicas para integrar la Ciencia Ciudadana y otras formas de participación abierta de actores sociales en estrategias y políticas de ciencia.
La Recomendación de 2021 de UNESCO sobre Ciencia Abierta – que amplía su alcance para incluir el conocimiento científico, las infraestructuras, los sistemas de conocimiento y la participación abierta de los agentes sociales – ha permitido adoptar recientemente una concepción más amplia de los fines y objetivos del movimiento internacional de ciencia abierta. En respuesta, los debates actuales sobre políticas públicas en este área están avanzando hacia la aplicación de la ciencia abierta a través de políticas y estrategias de ciencia nacionales.
Mientras que los instrumentos de políticas públicas para apoyar ciertos aspectos de la ciencia abierta están bien estudiados, la orientación sobre los aspectos «sociales» emergentes de la ciencia abierta ha quedado rezagada, lo que ha llevado a UNESCO a publicar recomendaciones. En este nuevo artículo, varias autoras del documento de orientación de la UNESCO Open Science Toolkit «Involucrar a actores sociales en la ciencia abierta«, sintetizamos los fundamentos académicos de estas recomendaciones. Esta investigación se basa en una búsqueda específica de literatura académica, política y gris en los campos de la ciencia abierta y participación comunitaria – con especial atención a la ciencia ciudadana – para identificar estrategias sobre cómo superar las barreras a la adopción de enfoques de participación de la sociedad. Los resultados presentan bloques de construcción de lo que podría ser un entorno propicio para la participación abierta de los actores sociales. El texto identifica las oportunidades y desafíos para el progreso y la evaluación de la participación abierta de actores sociales, y su incorporación en políticas de ciencia (abiertas) regionales y nacionales.
Este trabajo ha sido liderado por Uta Wehn (IHE Delft Institute for Water Education), en colaboración con Raquel Ajates (UNED), Caitlin Mandeville (Norwegian University of Science and Technology), Luke Somerwill (IHE Delft Institute for Water Education), Gitte Kragh (Aarhus University) y Muki Haklay (University College London). El artículo está disponible aquí.