Perspectivas laborales (CC. Ambientales)

Las buenas expectativas laborales en este sector son fruto, aunque suene paradójico, de la tradicional dejadez hacia el medio ambiente; ha sido tal su olvido que ahora, con las consecuencias de la polución, se pretende ponerle solución, o al menos palio, al problema mediante leyes y sobre todo, directivas europeas que dan alas a la contratación casi masiva de estos trabajadores.

La formación de los alumnos es, como sus perspectivas laborales, muy variada: predominan las ciencias naturales y la legislación que se alternan con materias más técnicas incluyendo también conocimientos sociales y económicos. Esta visión generalista supone la cara y la cruz de la profesión, en un campo en el que trabajan desde hace años otros titulados con formación más específica: topógrafos, arquitectos, abogados, economistas, sociólogos o ingenieros de montes, de minas, agrónomos, industriales, de caminos, etc.

 

Dentro de las nuevas perspectivas de empleo, podemos encontrar:

– Impulsor de innovación ambiental
– Optimización ambiental de los procesos industriales y productivos.
– Asesoría en gestión de residuos, vertidos y emisiones.
– Ambientalización de eventos y Organización de eventos de temáticas ambientales.
– Comercial de servicios ambientales
– Peritaje ambiental.
– Gestión ambiental y ecoetiquetado.
– Responsabilidad social corporativa.
– Ecoinnovación.
– Asesoramiento científico y técnico sobre temas de sostenibilidad ambiental.
– Asesoramiento, desarrollo y aplicación de la legislación ambiental.
– Evaluación y restauración de ecosistemas.
– Planificación, análisis y gestión de la biodiversidad.
– Ordenación y gestión del territorio.
– Estudio, análisis y gestión de los recursos naturales.

En términos generales los trabajos que se pueden realizar como ambientólogo/a son principalmente: la gestión ambiental en entes privados, la gestión y administración pública ambiental o la consultoría, auditoría y desarrollo e implantación de sistemas de gestión ambiental.

Si te gusta la investigación, también se puede trabajar en el diseño y desarrollo de productos, servicios y otras aplicaciones ambientales relacionadas con la ecoeficiencia y la ecoinnovación, o colaborar en el asesoramiento científico y técnico sobre temas de sostenibilidad ambiental. También queda la especialización en el estudio, diseño e implantación de políticas, planes, programas o proyectos ambientales, y la planificación, análisis y gestión de espacios naturales, así como la ordenación y gestión del territorio.

Dentro del ámbito de los recursos naturales (agua, aire y suelo) también se encuentra su análisis y gestión.

Además, se encuentran las posibilidades en la negociación y mediación de conflictos ambientales, y en la sensibilización, educación o comunicación orientada hacia la sostenibilidad y el desarrollo, en el análisis de riesgos naturales o en la vigilancia, prevención y control de la calidad ambiental.

Otras vías son la gestión energética, de residuos y de recursos hídricos, la interpretación, diseño y valoración del paisaje, y la seguridad e higiene industriales. También la carrera permite la evaluación del impacto ambiental, la economía ambiental y ecológica, a la prevención y análisis de la contaminación, y a la evaluación o restauración de ecosistemas.

No se puede olvidar que el medio ambiente depende de la naturaleza, pero que está muy ligada a la economía, el derecho, la industria, la demografía, el desarrollo humano, etc.

El estudio “Inserción laboral de los estudiantes universitarios” elaborado por el Ministerio de Educación, desvela que actualmente, 46% de los egresados en Ciencias Ambientales ocupan puestos relacionados con su formación académica. El informe destaca también que los egresados en Ciencias Ambientales tienen, en términos generales, unas condiciones laborales saneadas. Además, el 45% goza de contratos indefinidos y el 55% está como temporal.

Según el Observatorio de las Ocupaciones del SEPE del año 2019, en relación con la información del mercado de trabajo y los perfiles de empleabilidad en educación ambiental se observa que las actividades más contratantes según los Servicios Públicos de empleo del año 2018 son:

-Educación en un 54%
-Actividades administrativas auxiliares a las empresas, un 9%
-Servicios técnicos de arquitectura e ingeniería, ensayos y análisis técnicos un 7%
-Actividades asociativas con un 5%
-Publicidad y estudios de mercado con un 5%
-Servicios de alojamiento un 4%
-Otras actividades profesionales, científicas y técnicas 3%
-Resto 13%

Además, el SEPE en relación con el mercado de trabajo de Técnicos en instalaciones de tratamiento de residuos, en aguas y otros operadores en plantas similares, directamente vinculado con los titulados en CC. Ambientales dado que son los profesionales más demandados para ello, indican que las actividades contratantes según dichos servicios en el año 2018 son:

– Captación, depuración y distribución de agua en un 44%
– Recogida, tratamiento de aguas residuales en un 8%
– -Comercio al por mayor, un 7%
– Servicios técnicos de arquitectura e ingeniería en un 4%
– -Resto un 26%

La misma fuente indica que existe una zona afín vinculada con las CC. Ambientales (Biólogos, Botánicos, Zoólogos y afines) que para el año 2016 información del mercado de trabajo y los perfiles de empleabilidad vinculados son las siguientes:

-Investigación y desarrollo en un 55%
-Educación un 17%
-Actividades sanitarias con un 7 %
-Servicios técnicos de arquitectura e ingeniería 3%
-Publicidad y estudios de mercado con el 2%
-Otros con un 16%